Las autoridades dijeron que milagrosamente no hubo heridos. Luego de remover parte de los escombros, la mayoría de los evacuados regresaron a sus apartamentos, excepto los inquilinos de tres viviendas.
A los evacuados se les dio hasta las 6:00 de la tarde para que recogieran pertenencias o limpiaran sus hogares.
El derrumbe parcial afectó levemente también un servidor de lista de crianzas y los edificios 74 y 76 de la avenida Pinehurst y el 75 de Cabrini Boulevard, pero no hubo consecuencias.
Muchos dominicanos entraron en pánico y 35 apartamentos fueron vaciados de habitantes en lo que las autoridades investigaban la situación y determinaban si los inmuebles podían seguir siendo habitables después de los derrumbes.
Residentes en varios apartamentos dijeron que escucharon un enorme ruido alrededor de las 4:00 de la madrugada. Una inquilina, María Rivera, relató que tuvo que salir por la escalera de incendios con su esposo e hija.
"Fue muy aterrador, mi cama y otros muebles quedaron muy dañados", añadió la mujer. Añadió que las paredes están muy agrietadas.
Un portavoz de la Oficina de Manejo de Emergencias dijo que no hubo lesionados, pero se bloqueó la entrada a los residentes como medida de prevención.
Parte de los que viven en la parte trasera de los edificios dijeron que tuvieron suerte en escapar. "Estaba asustada, me desperté y vi que una de las ventanas de mi apartamento se había caído", dijo Rivera.
La mayoría de los residentes se aglomeraron en las calles hasta que llegaron brigadas de la Cruz Roja Americana para socorrerlos, siendo muchos llevados a una escuela cercana.
El derrumbe de la pared pudo haber sido ocasionado por una combinación de factores, entre ellos el tiempo de construcción y daños por acumulación de agua, según John Postel, vocero de la Oficina de Manejo de Emergencias.
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